Los principales canales por lo que circula la energía en
nuestro ser son denominados Nadis. Son una especie de “tuberías sutiles” que
aseguran la distribución de energía en todo el cuerpo pránico.
Para mantenerlos
purificados, el ejercicio clásico más eficaz se llama Nadi Sodhana Pranayama.
Es una respiración alternada, sin retención de aliento, con el fin de
equilibrar, de igualar la corriente pránica que pasa por ambas fosas nasales, y
principalmente de purificar la red completa de nadis.
Antes de comenzar el ejercicio, es importante saber cuál es
la manera correcta de tapar las narinas. (con respecto al mudra hay varias versiones,
pero lo importante es dejar dispuestos el dedo pulgar y el anular para que nos
asistan al momento de la alternancia). El sitio sobre el cual debemos ejercer
una presión suave para cerrar la fosa nasal es justo donde termina el hueso que
sentimos lateralmente al deslizar los dedos desde los lagrimales hacia abajo.
Para comenzar el ejercicio debemos adoptar una postura
corporal correcta, sentados con la espalda derecha, con actitud relajada.
Hacemos una respiración profunda por ambas fosas nasales.
Luego, tapo la derecha, inhalo por izquierda.
Tapo izquierda, exhalo por derecha, vuelvo a inhalar por
derecha.
Tapo derecha, exhalo por izquierda, vuelvo a inhalar por
izquierda.
Tapo izquierda, exhalo por derecha, vuelvo a inhalar por
derecha.
Tapo derecha, exhalo por izquierda, vuelvo a inhalar por
izquierda…
Y así sucesivamente,
prestando total consciencia a la alternancia y buscando que la respiración sea
profunda, lenta y silenciosa. 5 minutos es un buen tiempo para iniciarse en esta técnica,
luego puede incrementarse, siempre evitando experimentar fatiga.
Después de dos o tres minutos, si sentimos calor en el
rostro, es el indicio de que se ha estimulado la respiración celular y que el
ejercicio ha alcanzado una de sus metas: recargar las baterías celulares con
prana fresco.
La práctica regular de este ejercicio purifica los nadis en pocas
semanas. Los momentos más favorables son la mañana y la tarde, es importante no
practicar inmediatamente después de una comida.
A purificarse!
Fuente conceptual: André Van Lysebeth – Pranayama, la
dinámica del aliento.